Entrevista a The Librarian. Apostador Profesional

"No puedes invertir la mitad de tu capital en humanos"

Son las 10 de la mañana de un jueves en la Plaza de Cataluña todo el mundo se afana a trajinar bolsos y carpetas hacia sus centros de trabajo o de estudio. De entre todos ellos, aparece Xavier con las manos en el bolsillo, sin bolsas ni carpeta que lo hagan parecerse a los demás. Este apostador profesional barcelonés de 28 años hace cinco años que vive de las apuestas que hace a través de Internet en diferentes deportes y se ha convertido en un estudioso de la frecuencia en que se dan ciertos marcadores. Es una tradición anglosajona que a un jugador profesional le pongan un mote los otros jugadores: en el foro restringido a jugadores profesionales que frecuenta le han puesto el mote de "The Librarian", por sus conocimientos sobre la materia de las apuestas. Le propongo ir a hacer la entrevista a un "centro recreativo" lleno de maquinas tragaperras de la calle Pelai y me sorprende diciéndome que estaremos mejor en el Ateneo Barcelonés. Aquí, en la mítica sala Pompeu Fabra, Xavier me explica que, además de jugador profesional, es licenciado en Filología Inglesa por la UB y que éste es uno de sus lugares preferidos.
- ¿Cómo se convierte un filólogo en apostador profesional?
- Hace siete años, a raíz de una casualidad, vi la primera publicidad sobre casas de apuestas y, como jugador ocasional y para probar empecé a jugar, perdiendo mi capital dos o tres veces. Yo siempre he sido una persona que ha trabajado en casa, en diferentes trabajos, siempre me ha atraído la idea de poder marcarme el tiempo que dedico a trabajar. Cuándo vi que se podía ganar y ser serio, empecé a explorar y conocí gente muy interesante que se dedicaba a esto a través de Internet, la mayoría ex-brokers británicos cansados de la presión que supone arriesgar el capital ajeno en un mercado como la bolsa, tan parecido al de las apuestas, y que capitalizaban sus conocimientos ya adquiridos sobre gestión de capital y riesgo en mercados que tradicionalmente, tienen una imagen pública de deriva caótica, cuando no se así. Yo no tengo formación económica pero he podido aprender por mi propio estudio y gracias el conocimiento de los otros en los foros de Internet. No sólo eso, hay que reunir el capital suficiente para dedicarse a tiempo completo.
- ¿A qué deportes dedicas tus inversiones y por qué?
- Cuando eres profesional, no es cuestión de hacer una sola apuesta al mes y que sea segura, se trata de hacer muchas apuestas diarias, cuatro o cinco. Principalmente, yo me he especializado en estudiar la frecuencia de marcador en fútbol y hockey sobre hielo, que se puede abordar según la distribución de Poisson. Un resultado aparentemente caótico como es el resultado de un partido se puede modelar según una formula planteada por un matemático de hace siglos. También estudio el baloncesto del NBA y el NCAA, que no funciona según Poisson por su marcador continuo, no discreto, y la liga de fútbol americano, con el inconveniente que la temporada es tan corta que no permite dar sosten a un jugador profesional.
- Los últimos días, mientras preparaba la entrevista, mucha gente me comentaba que eso del juego es una cuestión de suerte, principalmente ...
- Esta afirmación no deja de tener una base: la gente percibe que la suerte es un factor importante en su vida. Continuamente pasan sucesos arbitrarios en torno a una persona en los que se intenta dar coherencia de una manera u otra. Los griegos lo hacían a través de la idea de destino. Los jugadores lo hacemos a través de la estadística, que es la forma moderna del destino en Occidente. Las informaciones continuamente se dan en estadísticas: La DGT anticipa que por semana santa habrá más de cien muertes. Cuando un médico tiene que comunicar a una persona que se morirá no le dice: -Te morirás. Le dice: - Tiene un 30% de posibilidades de sobrevivir a dos años vista y un 20% a tres años. La estadística es el nuevo medio para luchar contra este tipo de caos cósmico en que vivimos.
- ¿Entonces, el juego es la muestra que este caos cósmico se puede ordenar mediante la estadística?
- El juego pone de manifiesto la necesidad humana de gestionar la incertidumbre. Gracias a eso y a Internet, las apuestas se encuentran en época de boom. La mayoría de jugadores, sin embargo, no tienen ninguna posibilidad, si quieres que te diga la verdad.
- ¿Por qué no?
- El jugador medio hace errores muy graves como son aplicar el sentimentalismo al apostar incondicionalmente por su equipo o apostar demasiada cantidad en proporción al capital a que se tiene. El primero que aprende un jugador profesional es qué cantidad tiene que utilizar en cada una de las apuestas, que nunca es superior al 2% o 3% del dinero que se destina a jugar, lo que los ingleses nombran bankroll. No importa si se trata de un Madrid - Barça o bien un partido de la tercera división Belga. Hace falta percibir una ventaja en tus estimaciones que no se refleje en el consenso general y explotarla. Como en un partido los que intervienen son humanos, nunca se tendrá la certeza de un resultado, no puedes invertir la mitad de tu capital en humanos, pueden estar cojos, haberse peleado con la novia. ... Sólo se cuestión de explotar repetida y mesuradamente, pequeñas ventajas.
- ¿Y cuáles son éstas ventajas que un profesional puede detectar?
- Al mismo tiempo de anticipar un resultado, hace falta tener en cuenta factores estadísticos, una parte dura y nada glamorosa que consiste al computar cifras durante horas: historia de cada equipo, enfrentamientos entre ellos, últimos resultados, factores de ataque y defensa ... Eso constituye un punto de partida importantisimo y nada valorado ya que, generalmente, se tiene la imagen del apostador en Montecarlo en un barco cuando el trabajo que realmente se le parece más es el de un oficinista. A eso hay que añadir ciertos factores psicológicos que marcan la diferencia y que son más imponderables: qué presión tiene cada equipo, qué se juegan, si la estrella está lesionada, si el partido queda emparedado entre otros más importantes ...
- Así, para usted ver un partido debe ser una guerra falta de pasión entre las cifras y los hombres...
- Sólo los veo de vez en cuando y de una manera ciertamente particular: Una de las apuestas más comunes que hago es el over/under, que consiste a determinar si un partido acabará con menos de tres goles o no. Eso hace que a veces te encuentres deseando que nadie marque ningún gol más, animando a las defensas. La gente suele desear partidos bonitos con muchos goles, y aquí es en donde hay una ventaja para los jugadores serios. Con todo eso, la pasión no se pierde: Siempre estás orgulloso de haber predicho cualquier cosa mejor que los otros. Eso no deja de ser un juego entre jugadores en el que una casa de apuestas que hace de mediadora y se lleva una buena parte del pastel.
- ¿Las casas de apuestas con fama de grandes vaticinadores de resultados, no detectan a aquéllos que se aprovechan del juego y de los trabajos que profesionales como tú habéis realizado en el campo de la computación de estadísticas y tratan de paliarlo?
- Las casas de apuestas son rivales temibles, principalmente porque se quedan un 5% de cada acción que se produce, eso les da una ventaja competitiva sobre el resto de los apostadors. Sin embargo, este factor está estimulando la competitividad entre casas de apuestas: Betfair lo rebajó al 2,5% y ciertas casas caribeñas como Pinnacle Sports lo han llevado hasta el 1%. Un profesional lo puede vencer fácilmente y este corredor, Pinnacle, sigue aceptando jugadores con estas características cuando otras casas convencionales te ponen límites si ven que ganas mucho. Sin embargo, los corredoress de apuestas siguen siendo negocios rentables por todas partes.
- Muchos de los corredores de apuestas a través de Internet son filiales de grandes grupos empresariales con la sede en paraísos fiscales. Por ejemplo, Ladbrokes, que es un importantissim corredor británico propiedad del grupo hotelero Hilton y que tiene la sede en Gibraltar. ¿A la Hora de cobrar el dinero que gana, no es puede encontrar con problemas con Hacienda?
- En España, como en la mayoría de países europeos, hay un vacío legal al respecto de este tema. En principio no hay obligación de declarar estas ganancias, depende de la interpretación que se haga de la ley y, además, hay mediadores entre tú y la casa de apuestas que provocan que Hacienda no pueda conocer exactamente la procedencia del dinero que se ingresan en tu cuenta. Y tampoco parece que los interese demasiado: A menudo se comenta que en Tony Blair ha ganado mucha popularidad desde que abolió la tasa sobre el juego en un país, Inglaterra, donde cualquier yaya se juega la pensión. Este hecho va despertado mucha simpatía hacia el primer ministro inglés y proyectó el boom de las casas de apuestas a nivel mundial. No quiero ni pensar que pasaría si aquí te regularizas todo eso para desprendernos de la imagen casposa de bingo y tragaperras y empezar a capitalizar el boom.
- ¿Por qué crees tú que aquí no hay iniciativas para canalizarlo todo eso?
- En primer lugar, hay muchos intereses creados. Piensa que, en Cataluña, hay una o dos familias que controlan todo el panorama de Casinos, Bingos, centros "recreativos" y loterías autonómicas. Mientras tanto, el estado se hace cargo de las loterías, quinielasy las apuestas que aquí conocemos. Son juegos puramente azarosos. A ellos los interesa mantener el estatus quo e impedir que puedan establecerse casas de apuestas y ayudar a que todo sea más transparente. Pero con Internet ... Incluso el gobierno norteamericano se ve ligado de manos y pies. Mantiene el doble discurso hipócrita puritano que el juego está mal pero no lo pueden detener para ser la pasión número uno de los americanos desde su fundación. De momento no ha habido acciones contundentes contra los bookmakers caribeños que son capaces de mover millones de dólares al año.
- ¿Así los corredores caribeñoss están minando el mercado norteamericano de bookmakers?
- A quien perjudica mucho esto es al papel de Las Vegas en el juego americano. La ciudad de neón se está convirtiendo en un gran centro de convenciones, turismo y nuevas formas de juego como el poker. Con respecto a los deportes, ya queda lejos la época en que dos especialistas del casino Stardust se reunían en un antro, ponían las cuotas de la Superbowl (final de la liga americana de fútbol que mueve centenares de millones cada año en concepto de apuestas) y las hacían públicas en una pizarra porque el juego sólo estaba permitido en Nevada. El mundo en que todos los profesionales se conocían haciendo vida en bares de mala muerte con veinte pantallas de TV diferentes ha quedado atrás. Hoy, toda la acción está en Internet. La supervivencia de este modelo "parque temático" se basa en hacer pequeñas Las Vegas por todas partes como aquél que hace Disneylandias. De hecho existe el proyecto de hacerlo en un pequeño pueblo Húngaro y uno Sudamericano.
- Tú empezaste tu carrera profesional en el mundo del Poker Hold'em (variante americana que admite la estadística). ¿Cuáles son las características que requiere un buen jugador de poker?
- Ciertamente, jugué a través de Internet y físicamente en algunos torneos. Incluso conocí a dos campeones del mundo como Carlos Mortensen y "Miami" John. Son gente hecha de una pasta curiosa en tanto que, para ser un buen jugador de poker, no sólo hace falta tienerlos números en la cabeza sino que hace falta un carácter particular: Yo los he visto perder millones mientras están hablando de si hará buen tiempo para practicar el golf. No los interesa el dinero mientras juegan, no lo ven como tal, podrían ser judías. Un jugador de poker no ve una partida concreta, toda su vida se convierte en una partida cósmica inacabable dividida en pequeñas sesiones. Pueden perder un millón de dólares y la partida continúa, para ellos.
- ¿Para acabar, puede explicarnos alguna anécdota divertida que haya vivido?
- Una vez, mirando a un partido con un compañero de apuestas le dije: ¿-Que te juegas que entre los 22 jugadores más el colegiado hay dos que coinciden en el día y el mes en que nacieron? Él se lo pensó y dijo: -Es muy complicado, te doy 25 euros por euro apostado (4% de probabilidades). Yo acepté y me jugué doscientos euros (multiplicables por veinticinco) y perdí. ¡La probabilidad de que eso pase entre un grupo de 23 personas es del 50%. Así que mi colega me dio un 46% de ventaja y aun así perdí en este caso concreto, pero gané la batalla teórica al hacerle caer en un error ya que nunca tendría que haber ofrecido más de dos euros por euro apostado en esta apuesta!